Todo edificio, ya sea público o privado, de particulares o empresas, disponen de accesos que deben de ser protegidos, con el fin de dar protección a las personas que viven o trabajan en ellos, así como a los bienes tanto materiales como los bienes inmuebles.
A la hora de evaluar la seguridad de un edificio, debemos primero contabilizar cuantos accesos hay del mismo al exterior contando puertas y ventanas (ya sean grandes o pequeñas), y en qué situación se encuentran (están nuevas o antiguas, blindados o no, etc).
Es importante ver hasta qué punto estos accesos están protegidos y si disponemos o no de un control de acceso, y en qué estado se encuentra, ya que cualquier tipo de acceso tiene siempre algo de vulnerabilidad, al ser una abertura de nuestro edificio al exterior.
Lo que debemos preguntarnos es ¿para qué sirve un control de acceso? ¿cuál es el objetivo del control de acceso? Así cómo ¿qué es lo que queremos proteger en nuestra empresa?
La respuesta puede resultar muy obvia, ya que un control de acceso, protege el acceso en sí mismo, pero sobre todo protege, todo lo que se encuentra tras ese acceso, desde personas, a bienes o el propio edificio.
Pensemos en la protección de las puertas de acceso tanto exteriores como interiores de una empresa. Necesitamos proteger los accesos y podemos disponer o no de vigilantes de seguridad.
En el mercado existen un gran número de formas de proteger estos accesos, que van desde un simple candado, la llave de toda la vida, teclados con claves, tarjeta o la última tecnología biométrica (lectores de huella dactilar, de la palma de la mano, reconocimiento facial, del iris e incluso vía venosa), ¿por cuál decidirnos? ¿cuál es la sistema más seguro?, para ello hay que pensar en el número de empleados, clientes, trabajadores externos y subcontratas que van a acceder en el edificio y de que medios disponemos para su vigilancia.
La tecnología biométrica tiene la ventaja de permitir el acceso a la persona autorizada de forma inequívoca al utilizar datos biométricos con es el caso de la huella dactilar. ALMAS INDUSTRIES dispone de la última tecnología en soluciones de acceso por huella dactilar Optima ID con un diseño elegante e innovador con función de lectura de huella y tarjeta mifare, pantalla led y software de gestión que permite gestionar todos los accesos incluso de forma remota.
Así mismo disponemos de control de acceso por reconocimiento facial, por vía venosa, y soluciones específicas para sectores, como por ejemplo el control de acceso para las guarderías.