El Instituto Valenciano de Competitividad Empresarial de Valencia recomienda las cámaras termográficas en una guía que ha publicado donde se recomienda este sistema como control en los accesos a zonas de polígonos, así como a edificios y fábricas. De este modo se consigue la medición de la temperatura de las personas, uno de lo indicadores más importante para controlar el contagio del coronavirus. 

Otra de las medidas que recomienda es la reducción de espacios comunes como comedores o salas de espera, el reparto de mascarillas y guardar una distancia de seguridad como mínimo de dos metros. 

El IVACE también recomienda mantener medidas que ya se aplicaban al inicio del confinamiento, como el teletrabajo y la flexibilidad de la jornada para evitar concentraciones de personas. De este modo la gestión de la plantilla y de sus horarios deberá hacerse mediante sistemas telemáticas, como por ejemplo aplicaciones para el móvil o portales web que permiten fichar al inicio y final de la jornada laboral en remoto.

Tecnología para detectar la fiebre y fichaje en remoto para favorecer el teletrabajo

En esta ‘nueva normalidad’ los trabajadores tendrán que acostumbrarse antes de entrar a sus lugares de trabajo y a las salidas a un control previo sanitario que consistente en la toma de temperatura. Si la medición de la temperatura es superior a 37,5°, el empleado debe ser alertado de inmediato y dirigirse a su casa donde llamará  a los servicios de emergencia.

En este sentido, la tecnología ya está preparada y al servicio tanto de los ciudadanos, como de las empresas. Por ejemplo, nuestra solución de control de accesos mediante reconocimiento facial mide la temperatura de las personas, al mismo tiempo que comprueba si esta lleva la mascarilla recomendada. Con un margen de 0,3 ºC, el sistema de reconocimiento facial está programado para no permitir el paso a aquellas personas que superen los 37,5ºC y/o no lleven mascarilla, en caso de que esta sea una medida que haya adoptado la empresa.

En la medida de sus posibilidades, las empresas y también los establecimientos abiertos al público, deben adoptar este tipo de medidas. En caso de bares o restaurantes, las cámaras termográficas, que miden la temperatura de las persona a su paso, alertan en caso de que algún cliente supere los grados permitidos. Esta solución es la medida idónea para zonas de paso con mucha afluencia, ya que existen modelos de estas cámaras que son capaces de medir grupos de personas a la vez. De este modo, se evitarían aglomeraciones o interrumpir el paso, por ejemplo , a la entrada y salida de fábricas con decenas de trabajadores. 

¿Cómo funcionan las cámaras termográficas?

Un sistema de cámara termográfica tiene la apariencia de una cámara de videovigilancia común, sin embargo esta no solo muestra en pantalla la pantalla la imagen “real”, si no que también contamos una imagen de la misma escena con la radiación calorífica que emiten los cuerpos. 

Las cámaras térmográficas trabajan dentro de este espectro electromagnético en un rango conocido como infrarrojo térmico, que es aproximadamente entre los -20 y los 350 ºC. Mediante una serie de mecanismos, el sistema cambia su resistencia a eléctrica y se equipara a una determinada temperatura corporal. En esta fase final es donde se le asigna a cada temperatura un color determinado y es donde aparecen esos mapas coloreados tan llamativos.

Las soluciones de control de temperatura  son complejos y son muchos los modelos disponibles en el mercado. Lo más aconsejable es que las empresa de seguridad especializada estudien cada situación de manera individual, y detecten exactamente qué sistema se adapta mejor a las necesidades de cada negocio o empresa.

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