Las zonas deportivas de Berango son unos puntos cada vez más seguros ante cualquier incidencia. En este sentido, el Ayuntamiento de la localidad ha instalado tres desfibriladores en las instalaciones deportivas municipales: el campo de fútbol, el kirolgune de Karabigane y el frontón. Este equipamiento de última generación servirá para ofrecer los primeros y vitales auxilios a quienes sufran algún tipo de infarto o accidente cardiovascular en estas infraestructuras. De este modo, Berango se consolida como un municipio cardiosaludable.
Un desfibrilador puede salvar muchas vidas y, por ello, la incorporación de este dispositivo es un gran avance para los espacios deportivos de la localidad. Pese a ser desfibriladores de última generación, su uso es sencillo para cualquier persona y sus instrucciones de uso aparecen en el propio aparato. Estas directrices para aplicar las funciones del desfibrilador sobre el paciente que así lo requiera son simples y muy visuales. Asimismo, la empresa instaladora de los dispositivos ofrecerá charlas explicativas en el polideportivo para que, quien lo desee, aprenda de primera mano a utilizar esta herramienta básica para salvar vidas.
Estos desfibriladores de última generación son semiautomáticos y disponen de un servicio de televigilancia y teleasistencia durante las 24 horas del día. Son aparatos inteligentes que ofrecen un diagnóstico inmediato del paciente y que, además, indican la carga eléctrica que requiere el paciente para que la reanimación sea lo más exitosa posible. Con estos dos datos básicos, se gana una pequeña batalla en una lucha en la que el tiempo es oro y en el que la rapidez y la eficacia pueden valer una vida.
Por su parte, los desfibriladores también cuentan con un servicio de alerta telefónica que alerta a los servicios sanitarios de la incidencia y desde el que se guiará a quien vaya a usar este dispositivo con el fin de que lo manipule de la forma más eficaz posible. De esta manera, las áreas deportivas berangotarras cuentan con tres desfibriladores que, aunque sea mejor no tener que utilizarlos, pueden salvar más de una vida. - M. A. Pardo